Recambio de implantes mamarios ¿si o no?
Hay una pregunta que de forma sistemática me hacen las pacientes que consultan por cirugías en las que vamos a implantar prótesis. Por ello he pensado en escribir este post con la intención de contestar a esa pregunta de la forma más clara posible, siempre teniendo claro que, por desgracia, en nuestro mundo no existe la posibilidad de una respuesta firme al 100%. Pero en todo caso, intentaré aclarar una serie de elementos para que los pacientes puedan comprender cúal es la situación actual respecto a este tema, cúal es la recomendación que la Sociedad Médica da y cúal es la responsabilidad que las casas comerciales puedan tener en esta materia.
Vamos a responder a la gran pregunta.
¿Los implantes mamarios, hoy en día, tienen que ser cambiados de forma periódica o sistemática cada 10 o 15 años?
La respuesta es NO.
Los implantes, hoy en día, no se tienen que cambiar de forma predeterminada cada X años, pero (añadimos un matiz muy importante) los implantes SÍ deben ser revisados de forma periódica por especialistas para corroborar que los implantes siguen en buenas condiciones.
La evaluación de los implantes es sencilla, sólo es preciso realizar una ecografía mamaria. Si los implantes mamarios están en perfecto estado, éstos no deben ser cambiados. Lógicamente, si se detecta daño o deterioro prematuro de los implantes mamarios, entonces, sí se deberá proceder a su recambio.
Por lo tanto, ante la pregunta formulada la respuesta es: hay que realizar una revisión periódica de los implantes y, siempre que los implantes estén bien, no se tienen que cambiar.
¿Por qué, hace unos años, sí se recomendaba el recambio de los implantes mamarios y por qué actualmente la recomendación es, tan solo, revisar los implantes mamarios?
Antiguamente, se recomendaba el recambio de implantes cada 10 o 15 años. Puntualizar que no se trataba de una obligación, nunca lo ha sido, tan solo se trataba de una recomendación. Actualmente, como digo, el consejo es el de realizar un control de las prótesis cada cierto tiempo; si éstas se encuentran en buen estado, no hay necesidad de cambiarlas.
Cuando hablamos de, por decirlo de alguna forma, la época antigua, hace unos 20-25 años sí se aconsejaba a las pacientes el recambio de los implantes cada 10-15 años. El motivo era sencillo: los implantes eran de silicona líquida y cambiar un implante roto era algo largo y pesado, no era complicado, pero sí incómodo. La silicona líquida tiene una textura parecida al champú, no es tan líquida como el agua, ya que tiene cierta viscosidad; a eso le debemos sumar una “pringosa” particularidad, es muy pegajosa. Por ello, cuando se producía la rotura de un implante mamario de silicona líquida y había que retirarlo era preciso un procedimiento, que, como digo, no era técnicamente complejo, pero sí laborioso en sentido práctico; la cirugía era ardua, pesada, larga porque representaba una cirugía de más de una hora para asegurar que se había retirado todo el material. Por este motivo, se consensuó la recomendación de cambiar los implantes cada 10/15 años, procurando que el mayor número posible de ellos estuviera íntegro en el momento de la cirugía; de esa manera se pretendía que fuera una cirugía sencilla, de corta duración, ambulatoria… Por descontado que en algunos casos la prótesis se había roto, pero eran contados.
¿Por qué se consideró que el recambio de los implantes mamarios se debía hacer entre los 10 y 15 años?
Por estadística.
El pico máximo de roturas de implantes se produce a partir de los 10 años; antes la rotura es poco frecuente, pero a partir de los 10 años aumenta discretamente la incidencia de daño en las prótesis. Pasa ahora y pasaba antes, por ese motivo la recomendación se establecía a partir de los 10 años.
¿Cómo son los implantes mamarios hoy en día?
Actualmente, gracias a la aparición de los implantes de gel cohesivo de silicona la historia ha cambiado considerablemente. Las próptesis de gel cohesivo de silicona tienen una densidad diferente a los implantes de silicona líquida; aunque al tacto pueda dar la sensación de que es líquida, la realidad es que es mucho más densa, parecido a la gelatina.
Ello ha favorecido dos cosas:
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Si el implante se rompe no hay salida física, primaria, del material, ya que no hay líquido. Cuando hablamos de rotura nos referimos a una fisura en la membrana exterior, lo que nosotros llamamos concha o cubierta del implante; los implantes no estallan. Las prótesis actuales son de gel, este es uniforme por lo que, en caso de rotura, no sale de forma inmediata y mantiene su estructura de forma estable. Es cierto que a lo largo del tiempo, si el implante mamario dañado se sigue manipulando y sufriendo estrés, la fisura inicial se irá ampliando, pudiendo llegar a romperse de forma más importante; aún en este caso, el gel cohesivo permitirá asegurar una mayor integridad estructural.
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La estructura íntegra y uniforme de los implantes mamarios de gel cohesivo, a pesar de una rotura, permiten su extracción con relativa facilidad. Lógicamente, no es lo mismo extraer un implante íntegro que uno dañado, pero, en definitiva estamos hablando de una cirugía de 15-20 minutos; una cirugía relativamente ágil y segura, que permite una aseveración de que hemos retirado completamente toda la silicona y que el espacio periprotésico está perfectamente limpio antes de introducir una prótesis nueva.
La mayor estabilidad de los implantes y la necesidad de una cirugía con una duración media de 15 a 20 minutos, frente a los antiguos procedimientos de más de una hora, hace que la recomendación actual de mantener un régimen de supervisión periódico de las prótesis, y sólo cámbialas en caso de daño, sea mucho más lógica.
La recomendación ha cambiado.
¿Qué es lo que ha cambiado en las recomendaciones sobre los recambios de implantes mamarios?
Efectivamente, la recomendación ha cambiado radicalmente.
Hemos pasado de la clásica recomendación, repito que nunca fue una indicación, de recambio cada 10 o 15 años para anticiparse a una rotura, a la actual consideración de revisión sistemática y periódica de esas prótesis. Si durante la valoración se evidencia algún daño de alguno de los implantes será cuando se indicaría la cirugía secundaria para la sustitución del mismo.
Quiero puntualizar una cosa que creo que es importante: como decía al principio, en medicina no podemos garantizar nada de forma absoluta. Basándonos en esta premisa tenemos que tener claro que la realidad de la que hemos hablado es la que podemos afirmar hasta la fecha. No hay ninguna paciente que lleve un implante de gel cohesivo con más de 30 años, porque no existían. La experiencia que tenemos es la que se extrapola desde que este tipo de prótesis aparecen en el mercado hasta la fecha sin poder hacer conjeturas futuribles; los datos que tenemos pueden cambiar dentro de unos años. Nadie sabe si dentro de 15 años o 20 años habrán datos que determinen una durabilidad media para los implantes cohesivos y, por tanto, una indicación de recambio cada X años. Hoy por hoy no es así.
Recomendaciones finales sobre los implantes mamarios
Aprovecho para hacer hincapié en la recomendación que yo personalmente hago a mis pacientes. Los implantes mamarios:
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Es un elemento ajeno a tí por lo que tienes que tener conocimiento de ello. Desgraciadamente me encuentro con pacientes en mi consulta que ni saben qué implante tienen, no conocen el volumen, el tipo de implante, ni dónde lo llevan. Es importante saber qué llevas, cómo lo llevas, qué características tiene, etc,etc, etc.
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Los implantes mamarios hay que controlarlos. Hay que ser responsable, igual que hacemos con otras muchas cosas, tenemos que hacer una revisión periódica de los implantes. Es algo tan sencillo como hacerse una ecografía mamaria cada dos años para asegurarse de que el implante esté en condiciones.
Nosotros, en la consulta, ofrecemos la posibilidad de hacerlo sistemáticamente a todas nuestras pacientes y, efectivamente, si cualquier paciente, por desconocimiento, quiere plantearse una revisión, sin ningún problema puede contactar con nosotros y le gestionaremos una revisión con ecografía para analizar la situación de sus implantes mamarios y conjuntamente una consulta para valorar el estado global de la mama.
Sin más, espero haber dado respuesta clara a esta pregunta recurrente y fundada y espero con este post haber dado un poquito de luz y despejado dudas.
Todo por y para vosotr@s.
Si necesitas más información ponte en contacto conmigo, estaré encantado de aclarar cualquier duda.
Doctor Jose Mª Triviño
2 comentarios
Eva
22 Mayo 2023Hola. Hace un año que estoy operada de aumento simple, 510cc redondas motiva corsé por detrás del músculo y por el surco submamario. Hace aproximadamente un mes y medio una persona me dio un abrazo tan fuerte que me molestó en los pechos y a la semana siguiente otra vez me dieron un abrazo demasiado fuerte. Y hace una semana que he empezado a notar los implantes más duros (ya anteriormente los había sentido pesados) y estoy muy preocupada. ¿Podrían haberse roto por el abrazo tan fuerte o estar encapsulados? Muchas gracias de antemano y un saludo.
ResponderDr.Triviño
22 Mayo 2023Buenas tardes Eva, Disculpa por la demora. Un abrazo no es capaz de romper un implante, por muy fuerte que te lo den. El endurecimiento de los implantes se relaciona con el encapsulamiento que debería descartarse o, mucho más probable, con una contractura muscular producto de dolor o la molestia ante “los abrazos”. Te recomendaría que acudieras a tu especialista para que lo valorara. Un abrazo
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